Las mentiras acostumbran a ser una necesidad para aquellos que somos infieles, e incluso para los que no lo son, pero... cuidado con abusar.
Aquí en Romance Secreto es el pan de cada día. De hecho, y por defecto, nunca hay que fiarse de nadie. Hasta que no conoces muy bien a las personas, no se sabe si un contacto es fiable, o bien te la está dando con queso.
Tenemos, para empezar, aquellas que son necesarias para la infidelidad. En muy pocos casos, tu pareja oficial te dejará ser infiel libremente, así que no tendrás otra que ingeniártelas, inventarte historias, para poder pasar tiempo frente a la web de Romance Secreto y/o con tu amante. Siempre bajo mi punto de vista, lo mejor es que sean las justas y necesarias, ya que cuanto más inventes, mayor probabilidad tendrás de ser pillado.
Hay otro tipo de mentiras que se hacen para prevenirte de posibles malos rollos, son las mentiras por seguridad. Entre ellas, por ejemplo, cuando conoces a tu amante, que inicialmente crea k vives en otra zona que no es la tuya, o referente a tu identidad, dar una que no se corresponda con la realidad. También en lo referente a tu pareja oficial, lugar de trabajo, familia o amigos. Con el tiempo, pueden acabarse desvelando, pero dado su carácter preventivo, sin mala fe, acostumbran a tolerarse bien cuando se descubren.
Otra cosa muy diferente son las mentiras por el puro placer de mentir, o bien, para hacerse el interesante, especialmente delicadas si involucras a terceras personas que pueden verse salpicadas. Lamentablemente estas mentiras son demasiado más frecuentes de lo que debería y requieren que "el pecador" tenga una muy buena memoria para no fastidiarla en posteriores conversaciones. Son también fácilmente descubribles si se abusa de ellas y, evidentemente, si llegas a conocer a ésas terceras personas involucradas. Si te descubren puedes tener muy mala prensa, así que bajo mi punto de vista, mejor evitarlas. Siempre.
Mención especial para otro tipo de mentiras, en consonancia con mi anterior artículo, las provocadas por los celos. A modo de ejemplo, pueden provocar que te inventes citas que nunca tuviste si tu amante también las tiene, o por miedo a sus celos, esconder las que uno mismo tuvo.
Podríamos seguir... la lista se haría interminable. En fín, creo que las veces que lo hemos hablado en el chat, lo hemos tenido claro. Mentiras... las justas.

Por norma es cierto que un infiel al llevar una doble vida no tiene mas remedio que rodearse de mentiras,pero no siempre, pues hay matrimonios que consienten abiertamente la infidelidad, compartiendo vivienda que no vidas.
ResponderEliminarLo que jamás entenderé es la mentira, más alla de las piadosas, para intentar confender a alguien para que cambie su forma de pensar y ser.
Yo por mi parte no sabría vivir en el tenebroso mundo de la mentira, se me antoja un sinvivir recordar mentira tras mentira, soy demasiado comodona en mi vida como para eso, la verdad siempre la recuerdo,siempre es la misma.
Besitos
Adnil21